Ya se puede crear artificialmente escritura que parece humana. Investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y de la École Polytechnique de Montréal (Canadá) lo han logrado en su nueva a aplicación, a la que han llamado Gestures à Go Go (G3). Se trata de una nueva herramienta ideada para ser utilizada junto a un sistema de reconocimiento de texto manuscrito.
Actualmente, para poder reconocer escritura manuscrita o símbolos en pantallas táctiles, es necesario recolectar gran cantidad de datos para entrenar adecuadamente un reconocedor automático. Con la nueva herramienta, es posible mejorar los sistemas de reconocimiento de escritura sin tener que recurrir a un gran número usuarios o pedir a éstos que realicen diferentes ejecuciones de la misma palabra o gesto.
Se trata de una aplicación web, especialmente para pantallas táctiles pero también con ratón que sirve para analizar la escritura generando un solo modelo, que contempla toda la variabilidad innata en la persona a la hora de escribir.
Su uso puede ser útil en la verificación de firmas, especialmente en investigaciones policiales o judiciales, pero también para diferenciar la manera de escribir de los niños de los adultos y para determinar la existencia de Párkinson y tratar trastornos cognitivos como la dislexia.