La última edición del Informe Norton Online Family arroja una nueva luz sobre la realidad y los riesgos que conlleva crecer en la era digital. El informe de este año identifica un nuevo problema, el de la “ciberhumillación” (ciberbaiting), un fenómeno en alza donde los jóvenes se burlan de sus profesores y captan sus consternadas reacciones en vídeo con sus teléfonos móviles. Además, el informe revela el sorprendente número de jóvenes que se toman la libertad de utilizar las tarjetas de créditos de sus padres para comprar de forma online. Pero no todas son malas noticias: el informe muestra que seguir las normas de casa y tener un comportamiento responsable en Internet tiene un impacto significativo a la hora de evitar experiencias online negativas.
En líneas generales, casi el 62% de jóvenes en todo el mundo afirma haber tenido experiencias negativas online. Y casi 4 de cada 10 (39%), han tenido graves experiencias negativas online, como recibir fotografías inapropiadas de extraños, haber sido acosados o haber sido víctimas del cibercrimen. El informe también revela que los jóvenes activos en redes sociales abren más puertas a contenidos o situaciones que pueden ser complicadas de manejar por ellos: el 74% de los jóvenes en redes sociales se ha visto envueltos en situaciones difíciles online, comparado con el 38% de aquellos que se mantienen alejados de las redes sociales.
Los padres que establecen normas para el uso de Internet, resultan de gran ayuda para que los jóvenes tengan experiencias más positivas. El informe Norton Online Family revela que el 77% de los padres tienen reglas para el uso de Internet por parte de los jóvenes. De aquellos hogares en los que existen normas, los “niños buenos” que siguen las reglas se mantienen relativamente a salvo con un 52% que han sufrido una experiencia negativa online, el porcentaje se incrementa al 82% en el caso de los que rompen las reglas.
“Los jóvenes desarrollan su identidad online a más temprana edad que nunca”, afirma Vanessa Van Petten, experta en temas juveniles y autora del “Radical Parenting” (educación de los hijos radical), “necesitan padres, profesores y otros modelos de conducta que les ayuden a descubrir hacia dónde ir, qué decir, cómo actuar y más importante aún, cómo no actuar. Situaciones negativas online pueden tener repercusiones en el mundo real: desde acoso hasta pérdida de dinero en fraudes donde se proporciona información personal”.
Profesores en riesgo de ciberhumillación
Uno de los ejemplos más alarmantes del mal comportamiento en el uso de las redes sociales es la ciberhumillación (cyberbaiting), donde los estudiantes primero irritan o provocan a un profesor hasta que él o ella estalla y lo graban en sus móviles para poder subir el montaje online, humillando al profesor y al colegio. Uno de cada cinco profesores ha experimentado personalmente o conoce a algún profesor que ha sufrido este fenómeno.
Debido tal vez a la ciberhumillación, el 67% de los profesores afirman que ser amigos de sus estudiantes en las redes sociales los exponen a riesgos. Aún así, el 34% continúa siendo “amigo” de sus estudiantes. Solo el 51%, afirma que sus escuelas tienen un código de conducta de cómo los profesores y alumnos se deben comunicar a través de los medios sociales. El 80% de los profesores pide una educación online en los colegios más segura, posición que es respaldada por el 70% de los padres.
Asalto a la billetera digital de mamá
El 23% de los padres que permite que sus hijos utilicen sus tarjetas de débito o crédito para compras online afirman que sus hijos se sobrepasan. El 30% de lo padres, en todo caso, aseguran que sus hijos han utilizado sus tarjetas de débito o crédito para compras online sin su consentimiento. Y más de la mitad de los padres (53%) que permite que sus hijos compren online utilizando su cuenta revelan que sus hijos las han utilizado sin su permiso.
Pero ahorrar dinero no es la única razón para establecer una guía de comportamiento clara acerca de compras online y comportamientos seguros en Internet. El 87% de padres cuyos hijos han sido víctimas del cibercrimen también lo han sido ellos, un claro incremente de la media global que sitúa en un 69% a los adultos que han sido víctimas del cibercrimen en todo el mundo.
“Padres y profesores juegan un papel muy importante a la hora de mantener a los jóvenes -y a sí mismos- seguros online, y el Informe Norton Online Family revela la necesidad de una mayor educación”, asegura Marian Merritt, defensora de la seguridad en Internet de Norton. “Mientras que el 63% de los padres afirma que hablan con sus hijos acerca de la seguridad online, la tercera parte (34%) controla el uso online de sus hijos en secreto espiando su comportamiento en las redes sociales a sus espaldas. Mantener un diálogo abierto con los niños en un entorno saludable como el hogar o el colegio podría ser mucho más efectivo si se proporciona a los jóvenes las herramientas necesarias para mantenerse a salvo”.