La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos-ATA ha acogido satisfactoriamente la ampliación de horarios comerciales a partir del 1 de enero de 2013 y ha valorado que no se trate de una liberalización total.
“Dos aspectos esenciales y que de forma reiterada hemos trasladado al Gobierno y que se han visto reflejados en lo anunciado hoy por el Secretario de Estado de Comercio” subraya el Presidente de ATA Lorenzo Amor.
Según Amor “no se puede ir contracorriente en relación a las necesidades de los consumidores, pero es necesario ofrecer al comercio minorista el tiempo necesario para adaptarse a ese contexto y renovarse, y hay que ofrecerles todo el apoyo necesario para ello”.
En este sentido, la Federación ha insistido en que se debe seguir con medidas de estímulo, como ya se ha hecho con la licencia exprés o la nueva línea ICO que acaba de ser anunciada, dotada de nueve millones de euros, que ofrecerá al pequeño comercio créditos para gastos corrientes por un importe de hasta 30.000 euros.
“Se necesita un plan de choque ambicioso para la modernización y mejora del comercio minorista y esta nueva línea ICO va a suponer un verdadero salvavidas para muchos comerciantes autónomos con problemas de circulante y dificultades de acceso al crédito” concluye el Presidente de ATA.
Por otro lado, la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) considera que las nuevas medidas no producirán las consecuencias deseadas. “Ya ha quedado demostrado que abrir más tiempo los comercios no conlleva necesariamente vender más producto, pero aumenta los costes indirectos, alarga las jornadas laborales y precariza el descanso de los trabajadores autónomos y sus familiares colaboradores”.
Según los datos con los que cuenta UPTA, en los últimos años los comercios con menos de trescientos metros cuadrados han aumentado una media de más del 10% sus periodos de apertura al público, sin embargo los datos de venta minorista en los mismos comercios disminuyen en una media anual cercana al 6% desde el año 2009. Lo mismo ocurre en las grandes superficies, que con un régimen cada vez más libre de aperturas sin embargo están viendo caer sus ventas en un 8 % en lo que llevamos de año. “Sin embargo, la regulación de un régimen más libre de aperturas, en especial en festivos, obliga a muchos establecimientos a hacer un esfuerzo por abrir en domingos, con el fin de mantener una aparente competencia, claramente ineficiente”, señalan.
Las grandes superficies comerciales, que apuran toda la normativa legal de aperturas, vienen disminuyendo su ocupación en un 3,4% en el acumulado del año. Esto demuestra que a más horas abiertos, los comercios no generan más empleos. Sin embargo, los comercios denominados unilocalizados, regentados por trabajadores autónomos y familias, que evitan la apertura en festivos por el coste añadido que les genera, están manteniendo la ocupación con tan solo una disminución del 0,5% en lo que va de año, todo ello según los datos publicados periódicamente por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por otra parte, UPTA considera que muchas de la medidas anunciadas estaban ya contempladas por la legislación en vigor y funcionan con relativa normalidad en todas las comunidades autónomas. Las zonas consideradas turísticas son establecidas de forma regular por los Ayuntamientos y el margen que ofrece la actual Ley de Horarios Comerciales ha permitido a las CCAA consensuar el calendario de aperturas respetando los intereses de todos los sectores.
En conclusión, la organización cree que cualquier modificación legal “no produce más que incertidumbre, algo nada aconsejable en estos momentos de restricción de consumo y crisis de rentabilidad de los comercios más pequeños“.
“Medidas positivas como la de la flexibilización en las condiciones para acceder a las licencias de aperturas o la línea ICO para solicitar créditos en el comercio pueden verse empañadas por otras medidas como las anunciadas, que tan sólo benefician de manera circunstancial a algunas instalaciones comerciales concretas y que no son de interés general”, concluye Sebastián Reyna, secretario General de UPTA España.