Todos los negocios cuentan con un activo más importante que los demás: su personal. El personal es el corazón y el alma de una empresa, una afirmación más cierta que nunca en esta era digital y conectada. Sin embargo, a medida que evoluciona la industria, las empresas deben adaptarse para vencer los tres principales factores de presión que se ciernen sobre su activo más preciado:
- Los empleados cualificados son cada vez más difíciles de encontrar. Se trata de un tema bastante comentado y que la mayoría de las empresas habrán experimentado al tratar de contratar el personal que necesitan. No obstante, este problema se está agudizando a medida que crece la economía global y los ingenieros con experiencia se van jubilando.
- Los puestos de trabajo están cambiando. Aunque el motor que anima a los profesionales de la industria –su deseo y habilidad para resolver problemas- sigue siendo el mismo, cada vez más deben tomar sus decisiones basándose en los datos y en la tecnología, en lugar de en la prueba y error o el instinto y la experiencia.
- Los trabajadores están cambiando. Los millenials se han incorporado a las empresas y la llamada ‘Generación Z’ está de camino. Nos encontramos, por tanto, en una era en la que cada vez más personal está formado por ‘nativos digitales’, que han crecido conectados y que esperan que la tecnología simplifique sus vidas. Hay pruebas, además, que sugieren que esta generación tiene una actitud diferente sobre el equilibrio entre trabajo y resto de sus vidas que las precedentes. Las fuerzas que actuaban sobre generaciones anteriores han dejado de tener efecto sobre los millenials, pero ¿pueden adaptarse lo necesario las empresas de la industria para atraer ese talento?
Las empresas menos afectadas por estas presiones son las que son capaces de atraer el mejor talento
Las empresas menos afectadas por estas presiones son las que son capaces de atraer el mejor talento: las empresas elegidas para trabajar. Convertirse en una empresa de este tipo no es un proyecto menor, pero los beneficios son enormes. Y dar los pasos en esa dirección no tiene por qué ser complicado, aparte de que muchos de ellos no conllevan grandes inversiones.
Estas son mis recomendaciones clave para gestionar los tres grandes factores de presión sobre el personal y convertirse en una empresa elegida para trabajar en la era digital.
- ¿Qué tal formar su propio personal para evitar la escasez de trabajadores cualificados? Se trata de un enfoque cuyo éxito real estamos comprobando en Rockwell Automation. Contamos con un Programa de graduados en EMEA para nuevos contratados: los emparejamos conscientemente con nuestro personal más experimentado y los beneficios fluyen en ambas direcciones.
- Unas herramientas y entorno modernos son vitales para atraer el mejor talento: si su empresa es antigua y continúa siendo analógica e ineficiente, ¿cómo va a atraer a la iGeneration? Además, la tecnología de su empresa debe ser simple e intuitiva, ya que de este modo, su personal necesitará menos formación especializada. Piense, por tanto, en términos de sistemas abiertos, realidad virtual y tecnología de consumidor integrada y plataformas.
- Sea ético e inclusivo. Ético e inclusivo de verdad, quiero decir. Ethisphere ofrece buenas directrices para desarrollar una cultura corporativa adecuada. Existen muchos estudios que sugieren que cuando el personal es diverso, es más feliz y productivo.
- No sea perezoso a la hora de caracterizar a los millenials: descubra qué les mueve (podría no ser el dinero) y cómo pueden ayudarlo en su transición hacia la era del IoT. Este corto informe de ManPower Group pone a su disposición material para la reflexión y puede acabar con algunos estereotipos.
- Mejore el desarrollo profesional de los empleados. Conseguir que el talento llegue a su empresa es el primer paso, pero mantenerlo y desarrollarlo requiere comprometerse en animar a la gente a probar en distintos puestos y a desarrollarse dentro de la empresa. Muchas de las empresas elegidas para trabajar más reconocidas, como Google y SAS, utilizan una jerarquía mucho más horizontal y un enfoque colaborativo a los empleados. Y recuerde que, si hablamos de las capacidades necesarias en la era del IoT, ellas son precisamente las empresas que compiten por el talento que usted necesita.