Qué es y cuándo es necesario un IPR o stripping dental

Publicado el 03 Nov 2022

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El stripping dental o IPR (interproximal reduction), reducción interproximal del esmalte, es un proceso o técnica utilizada en ortodoncia paracrear el espacio necesario entre dientes para que estos se muevan. Cuando los dientes están muy apiñados, la mejor solución es pulir el esmalte entre las caras interproximales para disminuir la anchura dental. De esta manera se obtiene un espacio adicional para poder alinear los dientes de manera efectiva.

Para hacer un no se necesita anestesia, ya que, se trata de un proceso totalmente indoloro. Es, además, una técnica sencilla que no suele durar más de 30 minutos, y que suele formar parte de otros tratamientos de ortodoncia, como la colocación de alineadores invisibles. Y, según el espacio que se necesite ganar entre dientes, se utilizarán fresas, discos, o tiras de stripping.

En qué casos es recomendable

Los profesionales a cargo del tratamiento dental serán quienes decidan cuándo y en qué casos será recomendable llevar a cabo un IPR. Aunque, por regla general, el stripping dental se suele utilizar cuando hay protrusión de los incisivos, también en casos de ampliación de la arcada, y para la extracción de piezas dentales. En este último caso, se utiliza generalmente para evitar la extracción innecesaria y la pérdida consecuente de dientes. Se trata por tanto de una técnica conservadora.

Cuando los dientes están muy separados entre sí y no hay espacio suficiente para el tratamiento de ortodoncia, la técnica más rápida y efectiva es el IPR. De esta manera, los pacientes podrán minimizar la apariencia de apiñamiento o huecos entre sus dientes. También se puede recurrir a esta técnica si, ya iniciado un tratamiento dental, se observa que este no avanza según lo previsto debido al apiñamiento u otros factores.

La función principal de la técnica de remoción ortodóncica es ganar espacio en la arcada dentaria. En situaciones donde se necesita un espacio mínimo para colocar correctamente el diente fuera del hilo dental, es hora de usar una limación dental. Encontrar el espacio que se necesita sin deshacerse de las piezas dentales es una buena solución para pacientes con dientes apiñados que desean mejorar su estética sin perder ningún diente.

Sin embargo, el raspado dental también se usa para reducir los huecos que suelen aparecer después del tratamiento de ortodoncia. Al eliminar el triángulo formado por los dos dientes y reducir el ancho de los dientes en los milímetros necesarios, damos a las encías el espacio suficiente para recuperarse y crecer, tapando los puntos negros o huecos que se forman. De esta forma se consigue un efecto estética más uniforme.

IPR también se usa para reducir la protrusión de los incisivos, es decir, cuando los incisivos superiores sobresalen de los incisivos inferiores. Hay casos en los que la opción más recomendada es reducir el tamaño del incisivo lateral superior si está desproporcionado con el incisivo lateral inferior. Esta condición dental también se conoce como el problema del índice de Bolton.

Este método se utiliza para evitar la extracción y pérdida de dientes, ya que, gracias a él se puede obtener el espacio necesario para enderezar los dientes. El tamaño de los dientes se reduce en al menos 0,25 mm, favoreciendo que el arco se mueva hasta que los dientes vuelvan a su lugar. La extracción del disco dental se utiliza en casos de ortodoncia más complejos donde los dientes están bastante apiñados.

¿Para quién está recomendado este tratamiento?

El IPR se recomienda solo para pacientes que necesitan ganar un espacio mínimo en la estructura dental. Los pacientes con apiñamiento moderado pueden, por ejemplo, solucionar los problemas de espacio con la extracción dental, ya que es más sencilla y práctica que la IPR. Sin embargo, este es un tratamiento muy común para pacientes adultos que usan aparatos de ortodoncia de cualquier tipo con apiñamiento moderado.

Además, con esta técnica, lo que se persigue es limitar los movimientos que requiere el paciente para que haya espacio para seguir moviendo los dientes correctamente y lograr una sonrisa perfecta. Por lo general, los procedimientos de extracción de dientes y los IPR, no causan ningún problema para el paciente, siempre que el tratamiento sea realizado por un especialista calificado. Este procedimiento suele ser muy sencillo y es capaz de resolver de manera eficaz los problemas de espacio que pueden presentarse en pacientes con apiñamiento.

Sin embargo, si se acude a un dentista u ortodoncista y este no tiene los conocimientos necesarios para extraer dientes y/o quitar esmalte, el paciente puede tener problemas en el futuro. Para evitar cualquier inconveniente, es recomendable acudir a un especialista con experiencia en este procedimiento dental, que si bien, es sencillo de llevar a cabo, hay que utilizarlo con moderación y en su justa medida. Solo la calidad del centro y la experiencia profesional serán garantía de una IPR segura y eficaz.

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Redacción TICPymes

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