Los presuntos casos de espionaje por parte de las agencias gubernamentales de EEUU hacia ciudadanos y políticos de diferentes países del mundo están causando un revuelo que pocos imaginaban. Ahora, las partes implicadas que han sido espiadas señalan que se debe hacer un cambio de modelo en materia de ciberseguridad.
El impacto económico de todos aquellos actos cibercriminales resulta más rentable que la piratería o el tráfico de drogas. En el último año los costes generados por este tipo de actividades oscilan entre los 300.000 millones de dólares y un billón.
Una consecuencia directa de dichos casos de espionaje ha sido que grandes empresas de diferentes puntos del mundo han decidido cambiar sus planes o rescindir sus contratos con las empresas norteamericanas que protegían sus datos. En este preciso momento, dos de cada diez empresas optan por no trabajar con empresas estadounidenses, ocasionándoles pérdidas incalculables a los americanos que han perdido clientes y su nicho de mercado, cada vez más, es más pequeño.
Varias opiniones están sobre la mesa, mientras unos condenan los actos del gobierno de EEUU, otros proponen que si tan importante es el hecho de interceptar datos privados que se haga. Eso sí, en caso que se hiciera se exige que toda la información recabada se ponga al alcance del usuario final.
Ahora, todas las empresas que reniegan de EEUU están considerando Europa como el lugar más seguro para proteger sus datos. Sin ir más lejos, España está en el tercer lugar dentro del ranking europeo. “Esto es debido a que empresas especialistas en protección de datos trabajan bajo las estrictas leyes vigentes, tanto a nivel nacional como europeo”, explican desde eZone, y aprovechan para recordar que “cualquier negocio debe tener unas buenas prácticas de calidad en su trabajo, además de promover la innovación y la prevención de riesgos, pilares tan fundamentales para la continuidad de un negocio”.
