Los procesos inadecuados de reclamación de gastos lastran negativamente el compromiso de los empleados en la medida en que muchos trabajadores acaban por no reclamarlos a pesar de su desembolso.
Ésta es una de las principales conclusiones que arroja un estudio multinacional de investigación desarrollado por el fabricante mundial de software de gestión empresarial Unit4.
En este escenario, las empresas se benefician por una suma que supera los más de 14.000 millones de euros en base a datos de apenas nueve países objeto del estudio realizado por Ruigrok/Netpanel en agosto de 2015 entre directivos, cargos medios, a tiempo parcial o completo y que presentan reclamaciones de gastos en empresas de Bélgica, Francia, Alemania, Holanda, España, Suecia, Reino Unido, Estados Unidos y Canadá. En nuestro país los gastos no reclamados ascienden a casi 500 millones de euros anuales.
Uno de cada tres encuestados en estos nueve Estados reconoce que deja sin reclamar gastos en los que ha incurrido. Como media deciden no reclamar a su jefe unos 212 euros al año. Son los empleados estadounidenses los que dejan más dinero por reclamar: un 17% no reclama un promedio de 347 euros anuales que asciende a más de 8.700 millones de euros no reclamados cada año a las compañías estadounidenses, lo que supone casi el 2% del déficit presupuestario de la Administración norteamericana.
Por su parte, el 12% de los empleados alemanes deja de reclamar sus gastos, con lo que una media de 292 euros anuales queda sin reclamar y supone una suma de 1.300 millones de euros que las compañías alemanas dejan de devolver. El resto de los países obtuvieron resultados similares: Francia (€ 600M), Reino Unido (€ 1.300M), Canadá (€ 1.000M), España (€ 500M), Holanda (€ 500M), Bélgica (€ 200M) y Suecia (€ 170M).
Un 25% de los empleados consultados esgrime el tiempo invertido y lo frustrante del proceso como principal razón para no reclamar los gastos a su empresa. En España un 23% de los trabajadores afirma tener problemas de liquidez durante este proceso. En este sentido, nuestro país es el segundo en porcentaje de profesionales (29%) que sienten que su empleador se está aprovechando de ellos desde un punto de vista financiero, tan solo por detrás del 42% de los trabajadores de Estados Unidos. Todo esto redunda en una percepción negativa de la propia empresa.
«Lo único que crea una fuerte ventaja competitiva y sostenible a largo plazo para una empresa es la fuerza de trabajo. Las personas son la empresa. Las investigaciones muestran que los empleados implicados superan significativamente en sus resultados a los que no lo están. Las empresas que proporcionan un entorno de trabajo agradable y abierto ganarán la guerra de hoy por el talento. Con los costes de contratación superando aproximadamente en 1,5 veces el salario anual, la capacidad de atraer y retener a los empleados valiosos tiene un impacto significativo en los resultados de una organización», sentencia Kara Walsh, responsable de Capital Humano de Unit4.
