El 65% de las empresas modificarán sus puestos de trabajo en los próximos años, según la consultora TI Sistel. Además, la virtualización del escritorio empieza a ser una realidad en las empresas españolas, incluso entre las empresas industriales. Según Sistel, “el PC está muerto en la empresa, está siendo desplazado por las tecnologías emergentes como los Thin Client, las tablets y los dispositivos móviles”, incluso en un ámbito industrial “la virtualización de las workstations es ya una realidad –señala Nicolás López– y las instalaciones que estamos realizando superan con creces su capacidad y potencia, añadiendo las ventajas que ofrece la virtualización”.
La ubicuidad, la seguridad, la reducción de costes y la mejora de la gestión son los principales factores de decisión de las empresas a la hora de realizar un despliegue de puestos de trabajo virtual. La ubicuidad es también sinónimo de productividad y capacidad de respuesta. “La información está ahora en la nube –privada o pública-, es accesible desde cualquier lugar y además está más segura, protegida y está redundada, lo que permite no perderla en caso de desastre”, indica Nicolás López.
La virtualización se puede realizar sobre los equipos actuales de la empresa o sobre los denominados “thin client”, equipos diseñados para trabajar “contra” un servidor que son mucho más económicos, tienen un consumo muy reducido y tienen una vida útil mayor. En ambos casos, todas las aplicaciones, los derechos de acceso, los sistemas de respaldo… se encuentran en el servidor, lo que simplifica las actualizaciones, la gestión del sistema, los backups y reduce costes.
La mejora de la gestión del Hardware es clave en el modelo virtual. Las empresas ya no tendrán que hacer gestión de Hardware, Las actualizaciones ya no se realizan equipo a equipo sino desde el centro de datos para todos los empleados.