Esker, fabricante de soluciones para la automatización de flujos documentales, ha anunciado la disponibilidad de un libro blanco titulado “La automatización de facturas en Europa: visión del mercado de soluciones SaaS (Software as a Service)”. Desarrollado por la consultora IDC, y basado en un estudio llevado a cabo entre más de 100 compañías europeas, el documento examina la percepción de las empresas acerca de los inhibidores y beneficios de las soluciones de automatización de facturas, específicamente SaaS.
El 85% de las facturas de proveedores se reciben todavía en papel y más de la mitad de las empresas las introducen de forma manual en sus sistemas contables. A pesar de estas cifras, una mayoría de las compañías infravaloran el tiempo consumido por sus departamentos de contabilidad debido a la introducción manual de datos (30% de su tiempo), mientras que reconocen al mismo tiempo que esta forma de procesamiento lleva a numerosos errores y consecuencias negativas (pleitos y facturas sin cobrar).
Los principales beneficios de la automatización de facturas identificados por las compañías europeas incluyen: descenso en el tiempo de procesamiento, adherencia a las fechas límite de pago y archivo simplificado
Las empresas comprenden que la implementación de una solución de facturación electrónica les permitiría ahorrar tiempo, aumentar la productividad y mejorar su competitividad. Como resultado de ello, el 62% planean poner en marcha una solución en los próximos dos años.
Para minimizar los costes asociados a la implementación de una solución de facturación electrónica, el 84% de las compañías señalaron su preferencia por una solución SaaS.
“Este análisis llevado a cabo en Francia, Alemania, Italia, España y Reino Unido, muestra que las empresas europeas no son conscientes de la pérdida de productividad debida al procesamiento manual de facturas. Sin embargo, estas compañías entienden los beneficios que les puede aportar la facturación electrónica. Están preparadas para invertir en una solución SaaS que les permitirá reducir los costes de implementación y gestionar su inversión”, concluye Franck Nassah, Consultor de IDC en Francia.
