El mundo del trabajo es un panorama completamente diferente al de hace 10 años. Incluso elementos básicos tales como las horas y la ubicación de trabajo se han alterado drásticamente. Como se espera que los trabajadores siempre estén disponibles, trabajar de 9h a 17h ya no parece una solución estándar para los negocios. Smartphones, tablets y la disponibilidad de Internet de alta velocidad en un gran número de localizaciones también han significado que los profesionales estén conectados al mundo del trabajo en cualquier momento, mezclando la vida personal y profesional.
De este modo, no llegará a sorprender que las horas tradicionales de trabajo ya no sean las más productivas, según el último estudio dirigido por Regus. El estudio entre más de 22.000 trabajadores de todo el mundo les pregunta dónde y cuándo son más productivos. Los resultados indican que fuera del horario de oficina, antes de un aluvión de mails y llamadas telefónicas que interrumpen el flujo del trabajo, es cuando los empleados sienten que pueden sacar más trabajo. En particular, el estudio encontró que a quien madruga dios le ayuda ya que 1 de cada 2 españoles respondió que la primera hora del día es su momento más productivo, comparado con el estándar 9h a 17h (37%). Por el contrario, la hora más baja en términos de productividad para los españoles es la tarde (12%) y la noche (1%).
Y a medida que las horas de trabajo se expanden para adaptarse a la naturaleza cambiante del trabajo diario, también lo hace el espacio en el que las tareas son desarrolladas. Ya no se está encadenado a la oficina, el trabajo remoto se está convirtiendo en una práctica cada vez más común para las empresas españolas, permitiendo a los empleados elegir trabajar desde cualquier lugar como cafés o centros de negocios.
Además de esto, las sospechas tradicionales hacia la productividad del trabajador remoto siguen erosionándose a la vez que la práctica se vuelve más popular: un experimento conjunto entre las universidades de Standford y Pekín mostró que los empleados que trabajan desde casa eran en realidad más productivos que aquellos que están en la oficina, menos propensos a cogerse una baja por enfermedad y más felices. Sin embargo, cada vez hay más reservas contra el trabajo desde casa, a menudo por los mismos que trabajan desde casa.
Además de un entorno profesional dentro de casa (61%), el cual requiere un alto nivel de inversión por los trabajadores o sus empresas, los encuestados comentan que los centros de negocios están situados en los mejores emplazamientos con los que alcanzar el máximo de la productividad cuando trabajan en remoto. Es importante destacar que, a diferencia del espacio de casa que lleva su propio conjunto de distracciones, los centros de negocio de fácil acceso proporcionan un ambiente de trabajo más libre de las perturbaciones comunes que inciden en el tiempo de trabajo. Tal vez porque no son propicios para la concentración, los espacios de trabajo colaborativos son calificados igual que un espacio no profesional dentro de casa y solo el 3% de los españoles elige cafés ruidosos y faltos de privacidad.
Conscientes de esta cuestión, las empresas buscan sacar el máximo provecho de sus equipos a raíz de las considerables alternativas de trabajo flexible. A medida que se expanden los límites de la jornada laboral y el entorno de la oficina, las empresas querrán considerar qué espacios fuera de la oficina mejor se adaptan y facilitan la productividad de sus empleados.