El 64% de las empresas que han participado en el tercer barómetro europeo de la empresa familiar han hecho una valoración positiva sobre la situación económica; un dato significativo comparado con el 42% que lo podía afirmar en 2013. Estos son los datos del barómetro realizado por KPMG en colaboración con las Asociaciones Territoriales vinculadas al Instituto de la Empresa Familiar, que han consultado a 180 empresas familiares entre septiembre y octubre de 2014.
En 2013 el 25% de los encuestados calificaban la situación económica de negativa, pero esta percepción ha ido cambiando los meses siguientes y un año más tarde apenas un 8% pensaba lo mismo.
El estudio muestra que tanto empleo como facturación y negocio exterior, han mejorado con fuerza en la última parte de 2014, en palabras de Juan José Cano, socio responsable de Empresa Familiar de KPMG en España “ la recuperación económica empieza a reflejarse en la creación de empleo, el mayor reto de la economía española, puesto que casi la mitad de los directivos o propietarios de empresas familiares encuestados han aumentado plantilla en el segundo semestre de 2014 frente al 25% del mismo periodo de 2013”.
Con la facturación y la actividad en el extranjero ha ocurrido algo similar; en 2013 solo el 26% auguraba que sus ventas mejorarían, mientras que en 2014 ya era un 56% el que lo creía, llegando incluso a superar la opinión de los empresarios europeos. Respecto a la actividad exterior el 67% creen que su actividad creció en la segunda mitad de 2014. Aunque este dato está por debajo del registrado en 2013 (74%), probablemente a causa de la recuperación de la demanda interna.
La principal preocupación entre los empresarios sigue siendo la disminución de la rentabilidad, con un 58% de las respuestas, seguido por la incertidumbre política, con un 31%. La posible irrupción de Podemos en el panorama político español ha llevado a los responsables del Instituto de Empresa Familiar a reclamar un pacto de estado entre las grandes fuerzas para garantizar estabilidad política en un momento en el que los mercados están vigilando cada uno de los pasos que da España.