Un grupo de investigadores de la Universidad de California en Berkeley, en EEUU, ha presentado su última invención: el tampón inteligente. Conectado vía Bluetooth con el móvil, my.Flow calcula la capacidad de absorción del algodón higiénico y avisa a la portadora de cuándo ha llegado la hora de cambiarlo. La startup advierte de que su producto puede incluso prevenir el temido shock tóxico.
My.Flow funciona a través de un pequeño sensor que se engancha al hilo del tampón y que habla con la ‘app’, para que la mujer pueda consultar en cualquier momento qué porcentaje del algodón está ya empapado y calcular el tiempo hasta la próxima visita al baño. El programa permite, igualmente, crear un histórico de menstruaciones, muy útil frente a la próxima cita ginecológica.
Con un precio de salida de unos 50 dólares (sólo el sensor, los tampones se compran aparte), el proyecto busca financiación para salir al mercado.