Siguiendo el camino iniciado en otros países, los comparadores bancarios han llegado a España para quedarse. Con una historia relativamente reciente aquí, empezaron a surgir en torno al 2008, la financiación concedida finalmente por las entidades, a través de peticiones gestionadas por ellos, ha ido in crescendo año tras año.
En este contexto, las solicitudes de financiación de particulares que han tramitado los comparadores, entre enero y junio de 2017, se han traducido en la concesión final de 436.290.687,5 euros en hipotecas y 109.671.502,2 euros más en préstamos.
Esto es, los bancos y financieras con los que han trabajado los comparadores han acabado dispensando una financiación final que ha alcanzado 545.962.189 euros, según estimaciones de CrediMarket, líder en el sector al copar, según sus cálculos, el 40% del mercado de comparadores de financiación.
Todo ello, sin sumar la financiación finalmente concedida a través de las tarjetas ‘revolving’, aquellas que facilitan un límite de crédito (normalmente el máximo es de 4.000 euros) que vuelve a estar disponible a medida que se va devolviendo el importe usado.
A tenor de los cálculos de CrediMarket, las entidades han aprobado alrededor de 100.200 tarjetas sólo en el primer semestre de este año.
En este sentido, Francisco García, CEO de CrediMarket, destaca que se “está empezando a ver en España lo que ha sucedido en otros países como Inglaterra, Estados Unidos o Alemania, entre otros: un crecimiento claro de la financiación que finalmente se concede a través de las tramitaciones iniciadas a través de los comparadores”.
Con todo, según añade, “todavía queda mucho camino por recorrer”, si bien las cifras son ahora “destacables”, según sus cálculos: “Esto sólo es un inicio, las previsiones indican a que en un periodo relativamente corto multiplicaremos por varias veces el volumen de financiación que los bancos y entidades acaban concediendo a los usuarios que les llegan a través de los comparadores”.
