Los autónomos han llegado al Congreso para demostrar que su régimen de cotización a la Seguridad Social no contribuye a agrandar el agujero del sistema, tal y como aseguro hace una semanas la ministra de Empleo Fátima Báñez. Los líderes de las dos principales organizaciones de autónomos del país, UPTA y ATA, han comparecido ante la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo, la que estudia la reforma de las pensiones, para proponer ideas con las que allegar más recursos al sistema.
Para Eduardo Abad, Secretario General de UPTA, el sistema de autónomos es “injusto” porque obliga a los que menos tienen a cotizar por una base mínima que apenas se pueden permitir (272 euros al mes) mientras que los autónomos que más ganan pueden permitirse cotizar por esa misma cantidad “y dedicar recursos a sistemas de ahorro privado y acumulación patrimonial”.
Para combatir esta situación, Abad propone un sistema “progresivo, con tramos”. Así, los autónomos que ganen menos de 9.000 euros anuales (el Salario Mínimo) quedarían exentos de cotización, mientras que se subirían las aportaciones de los autónomos que más ingresan, los que ganan más de 60.000 euros al año. Esta medida, “la única solución para el RETA” -según el líder de UPTA- allegaría unos 1.400 millones mensuales al sistema, suficientes para compensar la actual situación deficitaria del mismo, tal y como recoge la Cadena SER.
Por el contrario, para ATA, a diferencia de UPTA, una cotización por tramos es “irrealizable”, porque “un autónomo nunca sabe lo que va a ingresar mañana, puede ir bien un mes y otro mes estar al borde de la quiebra, así que debe decidir él por cuánto cotizar”. “Se trata más bien de una cuestión de pedagogía”, añadía Amor, “que los autónomos entiendan que cotizando más tendrán mejores prestaciones”.
Para aumentar ingresos y ahorrar gastos, ATA propone que los administradores que tienen el control de su sociedad (unos 382.000) pasen a un régimen de cotizacion parecido al General, y que esa cotización contase como gasto de la sociedad (esto generaría, según Amor, 1.500 millones de euros al año); quitar los topes a las cotizaciones de los autónomos mayores de 47 años (otros 1.100 millones), cuotas superreducidas para los asalariados en pluriactividad y para los autónomos que no llegan al Salario Mínimo, mejorar la compatibilidad del cobro de la pensión con una actividad por cuenta propia y la subida constante de las bases medias y que las reducciones de cuotas a la Seguridad Social las paguen los Presupuestos Generales del Estado. Con todas estas medidas, Amor calcula que se ingresarían unos 7.200 millones de euros extra en el sistema en los próximos años.
